La Chaqueta Metálica: Testament, "Brotherhood of the Snake"


Texto: Mikel Fernández (Blog SurimiWorld)

A lo tonto, tenemos ya entre manos el esperadísimo 11º álbum de estos veteranos del thrash metal. Testament son de esas bandas que nacieron en los primeros años del thrash llamándose primero Legacy y teniendo que cambiar posteriormente de nombre a Testament, bajo el que debutarían en 1987 con el estupendo The Legacy.

A pesar de todos los vaivenes sufridos a lo largo de su carrera (tan sólo el cantante Chuck Billy y el guitarrista Eric Peterson se mantienen estables desde el disco debut), Testament para mí están por encima de Anthrax en lo que al panteón del thrash metal se refiere. Cuestión de gustos, como miles de cosas, pero para mí los neoyorkinos sólo tienen como mérito ser contemporáneos y coleguitas de Metallica. Si fuera estrictamente por su carrera musical, Testament deberían estar de pleno derecho en el Big Four.

Y es que Testament han aguantado de todo. Primero fue la marcha del guitarra Alex Skolnick, uno de los mejores músicos que haya tocado thrash metal, cansado en su momento de las limitaciones que le imponía el género. Poco a poco la banda se fue desmembrando, y la irrupción del grunge les terminó de rematar. Es más, recuerdo una crónica de un concierto en Madrid de una gira suya a mediados de los 90 (creo que en la gira del Demonic) y se remarcaba que la sala estaba medio vacía. La lista de músicos que ha pasado por la banda es enorme y supongo que la inestabilidad en la formación tuvo mucho que ver en su declive en los 90 (a pesar de que, para mí, Demonic y The Gathering sean dos discos tremendos).

En 2001 a Chuck Billy se le diagnosticó un cáncer y, para ayudar a financiar el tratamiento, se dieron varios conciertos con la formación original, llegando a publicar un disco con los clásicos de los 80 regrabados (First Strike Still Deadly, que no tiene mucho donde rascar). La reunión se fue alargando, las audiencias de los conciertos incrementando y así acabaron publicando el DVD en directo que recogía el último concierto de dicha gira (Live in London). Servidor los pudo ver en el Metalway de Gernika en dicha gira y puedo afirmar que dieron un señor recital a las 7 de la tarde del que aún hoy no me puedo olvidar.

Desde entonces han vuelto a grabar y girar de forma habitual, disfrutando de una segunda juventud que ya la querrían muchas otras bandas. Así, este Brotherhood of the Snake es su tercer disco de estudio, con la incorporación de Steve DiGiorgio al bajo como único cambio respecto a la formación que grabó el anterior Dark Roots of the Earth.

El disco está escrito principalmente por Chuck Billy y Eric Peterson, alma mater de Testament, por lo que sabemos lo que vamos a encontrar: puro thrash metal sin concesiones. Es una mezcla perfecta entre la agresividad del Demonic o el The Gathering con el lado más melódico del Practice What You Preach o el The New Order. Es un disco que gana con las escuchas, ya que a primeras parece ser simple caña, pero sucesivamente se van captando las melodías de los temas hasta ver que hay mucha más miga de la que parece. Pero si hasta Chuck Billy, cuyo tono de voz ha ido bajando con los años, alterna las partes de voz agresivas con otras mucho más melódicas.

Tras varias escuchas me atrevo a decir que no hay un sólo tema flojo en el álbum. De tener que destacar alguna, las tres primeras canciones del álbum (Brotherhood of the Snake, The Pale King y Stronghold), además de Neptune's Spear y Cana-Business, situadas al final del disco; tampoco debería olvidarme de Seven Seals, un medio tiempo en el que Chuck Billy saca su lado más melódico, con un estribillo de esos que se pega fácilmente y que en directo invita a ser coreado por todo el público (como muestra de las capacidades futurólogas del que firma, no lo están tocando en la gira). Pero ojo, el resto de temas tienen un nivel muy alto, de manera que el resultado final es un disco tremendo y no flojea por ninguna parte.

Testament demuestran una vez más que son de las bandas de thrash metal más en forma del momento, tanto en directo como en el estudio. Este Brotherhood of the Snake es un señor disco!

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