Texto: Txema Mañeru.
¡Es lo que tiene el boca a boca y el haber dejado un buen sabor en ella tras unas recientes actuaciones de Henri Herbert! El actual demonio del piano se marcó una incendiaria gira el pasado octubre. Ahora, medio año después, regresa a petición popular. El que fuera mano derecha con mucho protagonismo en The Jim Jones Revue, hasta contribuyó en la composición y grabación del gran “The Savage Heart”, se ha consolidado como trío de lujo. Le acompañan el contrabajista Tim Purkess y el que también fuera batería en la Jim Jones Revue, Nick Jones.
También influyó mucho en que abandonara a Jim Jones y se lanzara en solitario el hecho de que un vídeo suyo tocando en la mitad de la estación de King’s Cross-Saint Pancras, en Londres, se ha convertido en un fenómeno viral. Hace tiempo que ha superado la docena de millones de reproducciones y ha creado un interés inusitado en internet hacia él. ¡Ojalá lo aproveche y se consolide como merece!
Por su apasionada forma de tocar el piano, sobre todo, se le compara insistentemente con Jerry Lee Lewis, Albert Ammons o Little Richard. También por su estilo especialmente basado en el rock’n’roll más añejo y el trepidante boogie-woogie.
Además nos trae ahora un flamante “Wired EP” (HH Records) sin desperdicio alguno y que te deja con ganas de más. En disco y también con ganas de ir a sus próximos conciertos de los que te puedes informar en www.henriherbertmusic.com y en www.soulblonding.com. El artilugio comienza con ‘Pocket Venus’ y un ritmo trepidante entre la Jon Spencer Blues Explosion y Jerry Lee Lewis, The Killer. Nos sorprende con preciosos lentos como ‘You’re leaving me’ en el que el sólo al piano y voz emula al más íntimo Nick Cave. En ‘Fallen star’ te noquea por completo con una especie de country-góspel en el que canta a estrellas venidas a menos como Mickey Rourke o Errol Flynn. Tras otro buen rock’n’roll con mucho boogie como ‘Gumshoe’, en el que también deja su sello con el órgano, finaliza con ‘I don’t know where I’ve gone’. Un himno reposado que también nos recuerda al gran Nick Cave. Además tiene un parte solista al piano realmente mágica y como si tocara ragtime a cámara lenta. ¡Seguro que en directo acabará acelerándolo para que los espectadores puedan llegar al éxtasis espiritual! ¡Ya va siendo hora también de un LP completo con esta clase!
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