Novedades Karonte: Taraf De Haidouks, Phil Bee's Freedom y Ben Poole


Texto: Txema Mañeru.

Desde Karonte siguen trayéndonos las más variadas músicas sin importarles procedencias y estilos musicales. Entre los sellos más destacados que nos traen tenemos a Smithsonian Folkways, Ruf Records, Putumayo o las Rough Guides Series. Otro de nuestros favoritos es el belga Crammed Discs. Ahí nos llega la nueva preciosidad de los gitanos rumanos, Taraf De Haidouks. Además en su siempre cuidada cuto de blues nos traen sendos discos en directo de Phil Bee’s Freedom y del nuevo prodigio británico de la guitarra blues-rock, Ben Poole. Pero comenzamos con el magnífico repaso a 25 años de trayectoria de Taraf De Haidouks.

Taraf De Haidouks: “Of Lovers, Gamblers And Parachute Skirts” (Crammed Discs)

Toda una institución dentro de la música rumana y de Los Balcanes en general, son ya la multitudinaria “Pandilla de Tunantes” (esa podría ser la traducción más aproximada de su nombre) de Taraf De Haidouks. Son ya 25 años de años trayectoria que recibió un importante empujón al ser descubiertos por el etnomusicólogo suizo Laurent Auber, lo que les posibilitó fichar por el prestigioso sello belga de world music y mucho más, Crammed Discs. La gigante banda que homenajeó hasta a Jimi Hendrix con su genial “Band Of Gypsies” y que repitió faena con “Band Of Gypsies 2” junto a la fanfarria macedonia Koçani Orkestar, hace 4 años. Aquí y en su formato actual de 9 músicos, pero con 5 importantes colaboraciones más, revisan sus primitivas canciones que más han calado entre el público occidental. The Guardian le ha dado una puntuación de notable alto y Johnny Depp es uno de sus fans declarados más populares. Una orgia de violines, acordeones, címbalos, flautas y clarinetes. Tenemos sus canciones zíngaras de amor, folk turco y judío, baladas romanís, toques medievales, pop balcánico y endiablados y veloces instrumentales. Además, genial y merecida presentación en triple digipack y con un libreto de 28 páginas en la que se analizan las canciones, su historia y aparecen fotografías de todas sus épocas. En algunos casos superando la treintena de músicos. Preciosas baladas melódicas ribeteadas por los violines como ‘The high balcony in Ciolpan’ o esa estupenda balada búlgara titulada ‘Cold snowball’. También sus característicos y vertiginosos temas instrumentales con los violines al frente como en ‘Moldavian shepherd’s dance’ o en ‘The fields are blooming’, en la que además de acordeones y violines, hay momentos sublimes para la flauta. Estupenda voz femenina y virtuosos violines también para ‘Where do you come from, dear lady?’. Me encanta ese precioso lamento de casi 8 minutos que se titula ‘No snow, no rain’ con la grave voz de Gheorghe Manole y un violín que no para de gemir. No podía faltar tampoco su alegre ‘I’ve got a parachute skirt’ de nuevo con la voz protagonista de Viorica Rudareasa. La banda sonora ideal para las películas de Emir Kusturica. ¡Sensacional manera de conocer a una de las más importantes formaciones balcánicas de todos los tiempos!

Phil Bee’s Freedom: “Caught Live” (CRS)

El título ya indica que nos hallamos ante una banda capturada en su plenitud en directo. También el nombre de la banda del gran cantante de King MO, Phil Bee, indica que tienen plena libertad para crear música, más aún cuando la hacen subidos encima de un escenario. Son algunos de los mejores músicos de Holanda y Bélgica los que le acompañan para elaborar un set con predominio de temas ajenos. Tenemos un instrumental de tonos funk firmado por Joe Bonamassa al que sigue ‘For my brother’ con buenos fraseos a la guitarra y el estupendo órgano del teclista Pascal Lanslots. Les queda de miedo el clásico lento ‘Ain’t no love in the heart of the city’ con sus exquisitos punteos. Uno de los momentos más fascinantes y emocionantes lo firma la voz de Phil Bee en la salvaje balada de Brook Benton, ‘I’ll take care’. A continuación llegan guapas revisiones de Matt Schofield y del ‘Soulshine’ de Warren Haynes (Allman Brothers, Gov’t Mule) en clave de puro blues con destacada órgano y magistrales punteos. Se explaya toda la banda a gusto en los más de 15 minutos del ‘Old love’ de Eric Clapton y Robert Cray y hasta se marcan un bonus rack de estudio con el tema propio, ‘Sweet rain’, un precioso lento a base de piano y embelesadora voz que demuestra que pueden crear también buen material propio. ¡Habrá que apuntar su nombre!

Ben Poole: “Live At The Royal Albert Hall” (Manhaton Records)

Resulta aún más explosivo y personal el material de Ben Poole y también su particular forma de tocar la guitarra. Su prestigio y destreza le han valido los elogios de genios de las seis cuerdas como Jeff Beck, Gary Moore, Bernie Torme (Ozzy Osbourne, Deep Purple) o Richie Kotzen. Las revistas guitarreras se deshacen en alabanzas y le comparan con los inicios de Joe Bonamassa. Todo ello le ha llevado a grabar este caliente directo en un escenario tan importante como es el Royal Albert Hall y a estar girando en estos momentos por toda Europa con gran éxito y mejores críticas. Empiezan con un riff muy Doobie Brothers en un buen tema propio titulado ‘Let’s go upstairs’. Además de sus punteos destaca también ya el órgano de Sam Mason y los coros de Amy Eftekhari. ‘Love nobody no more’ es un estupendo lento, también propio, con emocionantes punteos y sentidos coros. En los temas ajenos se decanta un poco más por el soul. Así tenemos los más de 9 minutos del relajado ‘(I know) I’m losing you’, de Whitfield y Holland Jr.. También el clásico ‘Mr. Pitiful’ del gran Otis Redding, con un piano sensacional de arranque y con más sedosos coros a cargo de Amy. Siguen por el lado más lento con ‘Leave it on’ (Matthews/McCormack) y se lanzan ya al puro blues con el clásico popularizado por Eric Clapton, ‘Have you ever loved a woman’ que se va por encima de los 11 minutos. Lógicamente aquí vuelve a destacar la maestría de Poole a las 6 cuerdas. De propina también meten otra composición propia en estudio con aires a Gary Moore y titulada ‘Starting all over again’. Aquí se aprecia también que pueden aumentar cuota de mercado porque es algo más que un hábil guitarrista. ¡Al tiempo!

Comentarios