The Poets of Rhythm, Marta Tchai y Bobo Rondelli: variedad y calidad en Resistencia

Texto: Txema Mañeru.

El sello y distribuidora discográfica RESISTENCIA lleva años trayéndonos la más variada música desde cualquier rincón del mundo. Cuenta con ediciones propias como es el caso de MARTA TCHAI, pero también se encarga de la distribución de importantes y variados sellos. Es el caso de Daptone Records, cuna del mejor soul actual y del que nos presentan ahora el recopilatorio de THE POETS OF RHYTHM. Nos ofrecen también grandes discos de folk (el nuevo de Clannad está muy reciente), así como infinidad de clásicos del blues, soul, jazz y el rock’n’roll en Not Now Music. También nos traen desde el país vecino a Bobo Rondelli. Tienes toda la información en www.resistencia.es.




THE POETS OF RHYTHM: “ANTHOLOGY 1992-2003”


La mayoría de seguidores de artistazos como Sharon Jones, Charles Bradley, The Sugarman Three o Lee Fields sabrán qué es y qué significa el sello Daptone Records para el nuevo soul. Muchos de ellos también conocerán que antes de ese sello estuvo Desco. Pues bien, The Poets Of Rhythm estaban antes de ambos. A mediados de los 80 pusieron ya el germen Bo Baral y J.J. Whitefield de este combo alemán. Un grupo claramente enamorado de los Funkadelic de George Clinton, Parliament, Isaac Hayes o de los Meters. Con este recopilatorio podemos conocer sus doce primeros años de trayectoria y podemos comprobar lo que lucharon para resucitar el mejor funk y el soul para que luego Amy Winehouse o Eli “Paperboy” Reed aprovecharan su senda abierta. Se rescatan aquí sus primeros EPs, singles descatalogados de otros proyectos de ambos y canciones de sus dos primeros vinilos grandes, más algún inédito. Además trae una excelente presentación en digipack conteniendo libreto de 20 páginas. Nos suben a su tren con el puro y contagioso funk de “Funky train”. Aumentan la emoción en la voz en “South Carolina”, un precioso y pausado funk. “More mes son my thing” suena a versión de clásico mientras “It came over me” es una brutal y emotiva balada. No faltan unos cuantos incendiarios instrumentales (“50 yards of soul”,por The Whitefield Brothers, “The donkey” o la descatalogada “Discern / Define”). “Rhodesian girl” es otro tema sin voces, dirigido por la flauta, para una película de misterio y “Summerdays” es un buen y crepuscular lento en onda Isaac Hayes. Tenemos un villancico funk a cargo de The Soul Saints, también a The Pan-Atlantics, The Bus People Express o el sensacional “Wallow in the Myrth” firmado por Bo Baral’s Excursionists Of Perception. Este ultimo suena como un “Light my fire” por un grupo negro y con más psicodelia aún. La inédita “Path of life” cierra de manera sensual entre Bill Whiters e Isaac Hayes dejándonos con el sabor de un gran descubrimiento. Gozada para los seguidores del género.

MARTA TCHAI: “MOVIMIENTOS CIRCULARES”

La madrileña Marta Tchai ha tenido una anómala formación musical. Quizás también personal, pero porque se ha salido de las normas habituales. Para bien, creo yo. Se formó como bailarina de ballet y ha estudiado interpretación. Una lesión truncó su trayectoria en la danza y le llevó a lanzarse de lleno sobre las 6 cuerdas de la guitarra. Como siempre le había gustado escribir sus personales historias no tuvo más que desempolvarlas y darlas forma de canción para pasearlas por mil y un garitos. Así consiguió debutar hace 3 años con “Alaluz” para el pasado año entregarnos “Azul”. Siempre con Carlos Mirat acompañándola en la batería. El boca a boca ha hecho que este tercer trabajo excelentemente presentado en triple digipack con todas las interesantes letras nos llegue con la distribución de Resistencia. La tercera pata del banco para este logrado tercer disco la ha metido Tarci Ávila, genial multi-instrumentista gallego que ha trabajado con Igloo o Galicia Caníbal Musical. Pero el banco se podía caer y el cuarto y gran apoyo ha llegado en forma de prestigiosa producción musical a cargo de Paco Loco en sus estudios del Puerto de Santa María. Curiosamente empieza por la “Escena final”, un misterioso tema que luego se convierte en un eléctrico rock. Sigue trepidante y más rockera que Maika Makowski en la realmente enrabietada “Porqués”. “La habitación de Teresa” es un hermoso lento que contrasta con la brutal “Doctor Watson”. Uno de sus ídolos, Bob Dylan, se pasea por la emocionante historia de “Cumple de Bobby”. Con su despliegue emocional y sus arañazos rock es inevitable citar a mujeres como Patti Smith o Aurora Beltrán, más aún si escuchamos temas como “Movimientos circulares”. Mi favorita es “Traidor” un desolador, desesperado y triste tema lento, pero precioso y rompedor. En “Shala lara lala” comienza de manera calmada, pero luego va surgiendo la garra habitual, un poco en la estela de músicos que también cuentan importantes historias como Nick Cave o Tom Waits. En general hay un importante punto de desesperación en sus letras. También algo de amargura y de soledad, pero con momentos de esperanza porque si no… El final está también repleto de emoción en “Costilla o pulmón”. ¡Sí, Marta le pone a todo, mucho corazón!



BOBO RONDELLI: “A FAMOUS LOCAL SINGER”

Este veterano y polifacético artista de Livorno debiera ser mucho más conocido aquí. Veinte años y nueve discos de trayectoria contemplan ya a Bobo Rondelli. Además el cantante, actor, poeta y compositor es una estrella en Italia desde que debutó con su banda Ottavo Padiglione. Es habitual y hasta lógico que al hablar de Bobo se cite continuamente al gran Adriano Celentano. También a Paolo Conte, y en menor medida a Franco Battiato o Vinicio Capossela. Rondelli se nos presenta en este interesante y divertido trabajo acompañado una vez más por L’Orchestrino, una brass band de aromas balcánicos liderada por el saxofonista Dimitri Grechi, con la que lleva ya un tiempo funcionando en directo. Por eso bautizan su sonido actual como Brass & Roll. Dominan los temas propios aunque comiencen con la versión “Bimbo sul Leone” y su divertido rock’n’roll. En “Il palloso” tenemos fiesta y jolgorio muy bien dirigida por esos potentes y multitudinarios vientos. “La Marmelatta” nos trae su cara más melódica y preciosista, aunque eso no impide la gran riqueza instrumental, algo que marca a fuego todo el disco. En “Cuba lacrime” nos recuerda mucho a la sonoridad mediterránea del mencionado Paolo Conte. Le queda redonda su versión del clásico de Celentano, “24.000 Baci”. Se nota es que es su ídolo y espejo. Con los vientos y las ganas de bailar al frente se la lleva a terrenos cercanos a la Dirty Dozen Brass Band mezclándose con los toques balcánicos de Bregovic. Sigue con el r’n’r vacilón en “Puccio sterza”. También tenemos muchos modismos cercanos al jazz y hasta buen blues (“Bobagi’s blues”). Otro de mis temas favoritos es “Bambina mia”, un precioso y melódico tema más lento que se mueve entre el vals y el ska. Vamos que la fiesta es variada y la sonoridad rica y abierta a la diversión y el baile, por momentos. ¡Bastante más que “Un famoso cantante local”!

Comentarios