Adam Green & Binki Saphiro y Caetano Veloso: novedades de Universal (por Txema Mañeru)

Texto: Txema Mañeru.

El sello UNIVERSAL sigue cuidando su fondo de catálogo en forma de espléndidas y completas reediciones como la doble DeLuxe Edition del “Broken English”, el mejor y más aclamado disco (coincidiendo crítica y público, cosa no demasiado frecuente) de la gran MARIANNE FAITHFULL. También con recuperaciones actuales de algunos de sus más granados clásicos. Es el caso de la mejor voz del soul (con permiso de Sam Cooke y Marvin Gaye), OTIS REDDING, de quien acaban de publicar un acertado “LONELY & BLUE: THE DEEPEST SOUL OF OTIS REDDING”. Y decimos acertado porque en un solo disco reúnen lo más desgarrador, nocturno y apasionado del cantante. El amor envuelve todo un disco con éxitos como “These Arms Of Mine” o “I’ve Been Loving You Too Long” y otros temas no tan populares pero con la magia y la fuerza de “Waste Of Time” o “Gone Again”. Si no tienes nada del de Georgia una excelente introducción, sin duda alguna. Tienes toda la información en www.umusic.com.

Pero lo mejor de todo es que tampoco dejan de lado el mejor material actual de todos los estilos. Así tenemos a los recientes ganadores del Grammy al mejor álbum, los MUMFORD & SONS con “Babel”, que acaban de entregarnos un precioso DVD en directo en Red Rocks. También tenemos la nueva aventura del todavía joven ADAM GREEN, esta vez junto a la joven y buena voz de BINKI SHAPIRO. Por otro lado tenemos lo nuevo de un veterano siempre en forma como CAETANO VELOSO, que de su Brasil natal ha llegado a todo el mundo. Nos centramos ahora en estas dos jugosas y heterogéneas novedades.



ADAM GREEN & BINKI SHAPIRO: “ADAM GREEN & BINKI SHAPIRO” (Rounder / Universal)

A pesar de su juventud, Adam Green tiene el culo pelado en mil y un proyectos. Montones de canciones desde normalitas hasta estupendas, muchos e irregulares discos y variedad de registros. Junto a Kimya Dawson fueron los creadores del llamado antifolk antes de que triunfaran Devendra Banhart o Joanna Newson. Lo hicieron con discos en solitario por separado y como The Moldy Peaches. Un enamorado de los Ramones, Ray Charles, Hank Williams, John Fahey, Harry Smith, Scott Walker o Buddy Holly haciendo canciones de autentico lo-fi que encantaban a los seguidores de Jonathan Richman, Half Japanese, Will Oldham, Ween, Beat Happening o Violent Femmes. Luego creó buenos discos más pop como “Gemstones” o cercanos al estilo de los buenos crooners como “Jacket Full Of Danger”. Este precioso disco junto a la gran voz (sintetizador y armonías) de Binki Shapiro (líder de los interesantes y seductores Little Joy) tira más por el lado de los crooner. También por la senda de Burt Bacharach y Dionne Warwick o por los mágicos duetos de Nancy Sinatra y Lee Hazlewood o Serge Gainsboug y Jane Birkin. Sonido impecable con una banda acompañante en la que destaca el multi-instrmentista Josiah Steinbrick. Buenas guitarras eléctricas y ambientes misteriosos cercanos a la Velvet Underground en “I never found out”. Antes también, en una preciosidad como “Here I am” su voz suena un poco como la del más calmado Lou Reed, aunque dice odiarlo. Muchas melodías las firmaría el mismísimo Burt Bacharach. Es el caso de “Just to make me feel good” que además de hacerte sentir bien es una preciosidad como las mejores firmadas por Nancy Sinatra y Lee Hazlewood. “Pity Love” tiene un elegante aire al señor Frank Sinatra y sorprenden los cambios de ritmo de “What’s the reward” con guitarras cercanas al surf-rock y melodía que embelesa. Aquí nos podemos acordar también de otro gran dúo reciente como es el de Mark Lanegan & Isobell Campbelly en otros momentos también de los She & Him que forman M. Ward y Zooey Deschanel. Gran producción de Noah Georgeson y habitual y radiante masterización a cargo del experto Greg Calbi. “Don’t ask for more” es otra joyita casi al final que no te deja hacer caso al título y te deja con ganas de más. La intensa y nocturna “The nighttime stopped bleeding” acaba inquietante pero enamorando a la manera de Chirs & Carla o sus Walkabouts, otra gran referencia a la que nos acordamos en algunos momentos del gran trabajo que se hace cortísimo al no llegar sus 10 temas a la media hora. ¡Por mi parte, ojalá esta colaboración tenga continuidad!



CAETANO VELOSO: “ABRAÇAÇO” (Universal)

Nombrar a CAETANO VELOSO es nombrar al músico vivo más importante de Brasil. ¡Y eso es mucho en un país con tantos grandes músicos! Su repercusión internacional siempre ha sido muy grande desde su “exilio” obligado. No tenía fronteras y sigue sin tenerlas hoy en día. Casi cinco décadas han transcurrido desde que creó el tropicalismo. Ha hecho samba y bossa nova, sí, pero también buen rock, pop, funk y hasta tangos. Nunca para quieto y en los últimos años ha sido noticia gracias a buenos recopilatorios (las cajas “Quarenta Anos Caetanos”), tributos (“A Tribute To Caetano Veloso”) o directos (“Multishow Ao Vivo Cé”). Este último directo junto a BandaCé, la joven banda que le acompaña de nuevo en esta tercera entrega junto a ellos que es “Abraçaço” (Universal). ¡Y vuelven a lograr un trabajo vivo, ecléctico y con muy buenas canciones e historias. Hay gemas reposadas de aires brasileños como la estupenda “Quando o galo cantou”. También se mueve por esos sonidos en “Quero justo” o en los 8 minutos y medio de “Um Comunista”, ambas con parsimonia en la música, pero no en la agresiva letra de esta última. Nunca se calló lo que pensaba y ahora tampoco lo hace. Pero BandaCé es un trío joven de pop-rock y eso se nota en ciertos arreglos de estos y otros temas. Así se inicia con un ritmo vivo en “A Bossa Nova é foda” que tiene poco de bossa nova a pesar del título. En el tema “Un Abraçaço” tenemos espectaculares guitarras rock y un contagioso ritmo lleno de swing. “O Império da lei” conjuga perfectamente un ritmo brasileño con toques rock a un tiempo. En “Parabéns” necesita una única estrofa para alucinarnos con su imparable ritmo. “Funk Melódico” es lo que el título indica y puede gustar a los seguidores de Gang Of Four. Caetano siempre ha sido un revolucionario camaleónico como un John Cale o un David Bowie de los trópicos. Se nos despide con la única versión del trabajo que no es más que la íntima (pero con guitarra eléctrica) “Gayana” de Rogério Duarte. Además aquí le ayuda su también revolucionario hijo, Moreno Veloso, con el bajo y los platos. ¡De nuevo infalible, de nuevo con historias y canciones estupendas para mostrar!

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